El aparato auditivo de tu perro no es sólo responsable de su excelente capacidad auditiva, si no también de su equilibrio. Se divide en tres segmentos, cada uno con una función específica: El segmento externo y visible, es la oreja de tu perro. El siguiente, el oído medio, que comunica la oreja con la parte interna y protege a tu perro de sonidos muy fuertes. Por último el oído interno, que es un conjunto de conductos y cavidades que contienen líquidos que dan a tu perro la capacidad auditiva y también son responsables de su equilibrio. Para preservar el correcto funcionamiento de este importante órgano es importante limpiar las orejas de tu perro, esto ayudará a disminuir infecciones y otros problemas relacionados.
Antes de limpiar, revisa las orejas de tu perro
El momento de limpiar las orejas de tu perro es el momento para comprobar que todo esté bien en el, que no haya dolor ni sea visible alguna infección. La parte interna de la oreja debe ser de color rosa y no debe oler mal.
La presencia de cera en esta zona puede indicar que hay una dolencia y el mal olor indica una posible otitis. Si notas que tu perro se rasca mucho las orejas o sacude sus orejas constantemente puede tener una inflamación auditiva. Consulta estos síntomas con el veterinario, para descartar problemas en la salud de tu perro.
La hora de la limpieza
Empieza por la parte externa (y peluda) de la oreja, utilizando una toalla con agua tibia y un poco del shampoo regular que utiliza tu perro. Una vez limpio, retira el shampoo con cuidado y seca la oreja completamente con una toalla seca.
La parte rosa del pabellón auditivo y el oído medio requieren un poco más de cuidado. Utiliza una gasa no copitos, pues si tu perrito se mueve estos pueden hacerle algún daño interno. Cubre tu dedo con la gasa e introdúcelo de forma delicada en la oreja de tu perro, cuidando no presionar demasiado. El contacto de la cera y un masaje muy suave ayudan a retirar los excesos de cera que se hayan acumulado.
Perros con orejas grandes
Los conductos internos del oído de tu perrito se pueden ver como un laberinto de canales, que no permiten la ventilación constante. Por este motivo si tu perro es de orejas largas (Schnauzers, cockers,Poodles….) la limpieza debe realizarse con más frecuencia que en los demás perros, pues el pabellón colgante restringe aún más la circulación de aire.
La limpieza de orejas en un perro debe ser constante más no excesiva, pues esto también puede generar otro tipo de complicaciones. Se recomienda limpiar las orejas de tu perro por lo menos una vez cada 15 días y si es un perro de orejas largas una vez a la semana.
Fuente: Cómo limpiar los oídos de un perro