La llegada de un cachorro a casa, es una aventura increíble. Sus pequeños dientes afilados, su olor característico a mamá, su mirada dulce y cola juguetona, cautivan nuestro corazón en pocos segundos. Lo que pocas veces nos imaginamos, es que ese pequeño juguetón, crecerá rápidamente y se convertirá en un miembro más de nuestra familia, por muchos años. Por eso hoy queremos que conozcas, algunos tips básicos en la educación del peludo, ayudándote así a que la llegada de un cachorro, sea una experiencia emocionante y de crecimiento mutuo.
“El amor por todas las criaturas vivientes es el más noble atributo del hombre”.
Charles Darwin.
¡Estableciendo las reglas! – La llegada de un cachorro a casa.
- Lo primero que necesitamos hacer ante la llegada de un cachorro a casa es enseñarle cuál es su territorio y su lugar dentro del grupo familiar. Así como cada miembro de la familia tiene un lugar propio para dormir, comer, recrearse, hacer sus necesidades, disminuir su estrés, el cachorro también deberá tenerlo. Asegúrate de mostrarle bien cada uno de estos espacios que le corresponderán por mucho tiempo.
- Recuerda que nuestro cachorro, debe aprender a ser independiente. Cuando nuestros compañeros de vida son muy apegados a nosotros y no los enseñamos a disfrutar sus espacios sin nuestra compañía, estaremos incentivando a futuro problemas de comportamiento tales como: ansiedad por separación, destructividad y depresión entre otras; es por esto que ante la llegada de un cachorro a casa es importante comenzar a enseñarle a estar sólo en casa durante algún periodo de tiempo durante el día, de esta manera entenderá que no pasa nada malo y que regresaremos nuevamente. Para ello, saldremos de casa de la forma más natural, sin largas despedidas, ni palabras como: pórtate bien, sé buen chico, te quedarás sólo, al contrario sal de la forma más natural sin avisar con anterioridad que dejarás el lugar. A tu llegada, realízalo de la misma forma, de la manera más calmada y natural, para que el comprenda que esto será parte de su rutina y no sufra con nuestra ausencia. Puedes dejar a tu salida música suave que lo acompañe en tu ausencia y lo ayude a relajarse.
- Los cachorros son como pequeñas esponjas, que absorben su conocimiento durante sus primeros meses de vida, así que tu tarea consiste en pensar cómo quieres educar a tu pequeño, para que sea un perro feliz a lo largo de su vida. Es natural que las primeras noches, después de la llegada de un cachorro a casa escuchemos llantos provenientes de su lugar de descanso, es importante no acudir ante este llamado, ya que el asociará que cada vez que realice la acción tendrá por completo tu atención; así que no es malo dejarlos llorar mientras se acostumbran a su nuevo ritmo de vida. Asegúrate que su zona de descanso sea un lugar confortable y caliente y dale tiempo para que acepte los cambios.
¡Atención, es la hora de comer! – La llegada de un cachorro:
- Nuestro peludo debe crear una rutina a la hora de su alimentación, por eso ante la llegada de un cachorro a casa debemos establecer el horario diario para suministrar su alimento balanceado (las horas se deben ajustar a tu disposición de tiempo) y en lo posible no deben ser modificadas. Recuerda siempre que debes asesorarte por un especialista para seleccionar el que mejor se adapte a sus requerimientos. El lugar donde nuestro cachorro comerá siempre será el mismo, en lo posible, no debemos suministrar comida en nuestra mesa, para evitar hábitos incomodos con nuestro compañero.
- A la hora de servir el alimento acaricia a tu cachorro, retírale la comida, introduce tus manos en el plato, permite que el contacto entre ambos sea directo. Esto te permitirá enseñarle que quien suministra el alimento eres tú y que esto lo realizas en el momento que tu establezcas, no él. De esta manera comenzará a aprender su jerarquía dentro de la manada.
- Después de sus comidas es preferible que el cachorro permanezca en reposo, o con una mínima actividad física, con esto evitaremos molestias gástricas e intestinales, que podrían presentarse si el ejercicio se realiza inmediatamente luego de comer.
La hora de ir al baño – La llegada de un cachorro:
Este es uno de los principales problemas que tienen los propietarios ante la llegada de un cachorro a casa. Aquí algunos trucos para que aprender a hacer sus necesidades, sea un proceso más tranquilo:
- Generalmente los cachorros se alimentan y pasados entre diez a veinte minutos, sienten la necesidad de evacuar, por eso los primeros días podemos evaluar más o menos el tiempo que transcurre entre su alimentación y su deposición. Llévalo al lugar que elegiste para hacer sus necesidades, mientras lo puede hacer en la calle.
- Espera un poco, habla con el y espera que realice su deposición. Si lo logra con éxito felicítalo, dile una palabra cariñosa siempre, para que el comience a relacionarlo con un estímulo positivo. El uso constante de la misma zona, le permitirá al cachorro asociar los olores y de a poco se acostumbrará a este sitio para realizar sus necesidades.
¡Obediencia, hora de educar! – La llegada de un cachorro:
- No podemos dejarnos derretir ante una mirada dulce de nuestro peludo, ante la llegada de un cachorro a casa, debemos comenzar a cultivar la obediencia en él, para que a lo largo de su vida, logre distinguir cuando obra de manera correcta y cuando no. Nuestras mascotas son seres altamente perceptivos y detectan fácilmente nuestro estado de ánimo, debemos seleccionar una palabra corta, que dicha en tono fuerte logre ayudarnos a la hora de corregir a nuestro cachorro. Un ejemplo válido es la palabra ¡NO!, que debe implementarse en el momento correcto, cuando vemos que nuestro pequeño está haciendo cosas indebidas. El uso contante de esta palabra, logrará a lo largo de su vida realizar una asociación al regaño. Recuerda que los castigos físicos nunca deberán ser la forma de corregir a nuestros pequeños.
- Así como pensamos en reprender a nuestro cachorro, es indispensable premiarlo y reconocer las cosas buenas que cada día aprenderá. Selecciona una palabra como ¡MUY BIEN!, utiliza un tono suave y dulce para alabar a tu cachorro. Esta palabra puede ir acompañada de una caricia o un premio (como una galleta), para que el comience a realizar una asociación positiva ante sus buenas conductas.
¡Viajando en el carro! – La llegada de un cachorro
- Es fundamental que con la llegada de un cachorro a casa, comencemos a integrarlo con las actividades que generalmente realiza la familia. Si te gusta viajar o salir en el carro con frecuencia y quieres que tu compañero de vida también lo haga, es necesario comenzar a realizarlo en edades tempranas. Si nuestra mascota solo asocia nuestro auto con los viajes al veterinario o con procesos estresantes como el baño o el corte de uñas, posiblemente no disfrute salir con nosotros en este medio. Para permitir que el cachorro pierda el miedo al carro, es necesario dejar que realice un primer acercamiento, deja que el pequeño se acerque, lo olfatee, permite que se suba y reconozca lo que hay allí adentro. Anímalo con una galleta, un juguete o algún artículo que le guste, para darle la sensación de seguridad.
- Juega con él, acarícialo y permite que ese primer encuentro sea una experiencia agradable. Comienza con un paseo corto, recuerda que tu mascota siempre debe ir en el asiento trasero, las ventanas no deben ser abiertas en su totalidad. Una vez conseguimos este acercamiento, intensificaremos de a poco los paseos, para que él pueda disfrutarlos.
Estas son solo algunos tips que te ayudarán para que la llegada de un cachorro a casa, sea un proceso más tranquilo. Es necesario que recuerdes que la paciencia, amor y educación que tengas con tu peludo, tendrá frutos a lo largo de su vida y podrás disfrutar así la más hermosa experiencia de vida, un compañero inseparable.
Fuentes:
centauroveterinarios, royalcanin.es, loyal-pets, sspca.org, sspca.org