Les queremos compartir la charla que tuvimos con Camilo Quiñones, especialista en comportamiento canino, donde hablamos sobre la diferencia entre comportamiento y adiestramiento y algunas inquietudes más de los dueños de perros.
¿Cuál es la diferencia entre Adiestrar un perro y solucionar comportamiento canino?
Adiestrar un perro es crear una habilidad en una tarea específica, por ejemplo, enseñarle al perro a obedecer ciertas órdenes, como sentarse. Por otro lado, solucionar comportamientos caninos, es corregir una malinterpretación que tenga el perro del entorno.
¿Entonces, si te digo que quiero que le enseñes a mi perro a caminar al lado mío cuando lo saco al parque, eso es adiestramiento o corrección de conducta?
Realmente es falta de conocimiento por parte del dueño del perro, ahí no hay problema de comportamiento y no se necesita hacer un adiestramiento como tal, es simplemente transmitirle cierto conocimiento al dueño de cómo solucionar esa problemática, pero todavía no hay un problema de comportamiento.
Esta es otra clase de problemática que hay en la sociedad: la primera, cómo corrijo la mala percepción que tiene el perro del entorno. La segunda, cómo creo habilidades en mi perro para hacer algún deporte o una tarea específica. Y la tercera, cómo adquiero conocimientos para poder educar a mi perro. Estos son los 3 aspectos importantes que debe tener un adiestrador, un psicólogo canino o un etólogo, siempre tratando de entender qué es lo que necesita el dueño del perro.
Por lo tanto volviendo a la pregunta que me haces, el punto es cómo enseñarle al cliente, porque el perro todavía no ha arrastrado, no ha creado accidentes, simplemente lo que quiere el dueño es que su perro camine al lado.
Es decir, la falta de conocimiento del humano hacia el perro, es donde radica todo el problema, por ejemplo, cuando un perro le gruñe a todos los perros es porque el perro no se ha desarrollado en un entorno bueno para él, entonces tiene una mala percepción, y es ahí donde hay varias opciones:
Si como adiestrador, sólo sé técnicas de adiestramiento mi opción es: collar de ahogo, clicker y premios.
Si soy un etólogo, entonces esta persona va indagar si el perro se destetó muy temprano o no socializó de los 2 a los 5 meses.
Si soy un etólogo más humanista, va a preguntarse un poco por la persona, ¿por qué no tiene el conocimiento?, ¿es sola?, ¿acaba de pasar por una separación?
Y está el paseador que te puede decir, yo lo saco a pasear, le pongo bozal y por ahí lo saco adelante.
Es decir la aproximación que se tenga a la problemática depende de la persona a la que llegue el perro, es decir al profesional. El perro es un ser tan maravilloso que si le tiendes la mano, sea la que sea y el va a salir adelante por el lado que sea. Así sea que lo adiestren con collar, premios, con Cesar Millan, sea lo que sea, el siempre va a dar lo mejor de sí para poder mejorar, lo que necesita es que lo entiendan.
Si yo tengo a mi perro encerrado en un apartamiento o amarrado o nunca lo saco pero le estoy exigiendo a un adiestrador o a un etólogo que el perro debe cambiar, no vamos a llegar a ningún lado, vamos a seguir en el círculo vicioso de pagué x plata en colegio o adiestramiento y mi perro sigue igual, por lo tanto para mi, lo importante es transmitir el conocimiento, para poderle ayudar al perro.
¿Entonces, cómo podemos ayudar nosotros a transmitir este conocimiento?
Creando eventos y espacios donde la gente escuche la historia del perro, del lobo, por qué hay 500 razas, por qué cada raza es la mejor desde un punto de vista. Cada raza es maravillosa porque duraron 7 u 8 generaciones para crearla para que por ejemplo cazara ratones. Lo importante es crear espacios donde podamos enseñar qué es el perro, más allá de educarte el perro. Hay que crear charlas y transmitir de el conocimiento.
Muchas personas buscan el colegio canino como esa solución a la educación del perro, y esperan que el colegio canino solvente todos los problemas. Luego de un tiempo, ocurre que el perro no muestra resultados o al entrenador si le hace caso pero al dueño no. ¿A qué se debe esto?
Es un poco más profundo que eso, se debe a por qué adquirieron el perro. Muchas veces el perro llega a los hogares por abandono, por una falencia de amor, de respeto, de cariño en un hogar. “Yo compro un perro por qué no paso mucho tiempo con mi hijo, porque me dejaron y estoy solo; porque necesito una compañia”. Muchas veces el problema es más de fondo, va más allá de qué técnica voy a utilizar o qué collar voy a comprar, la gente necesita a veces entender por qué adquirió el perro para poder concientizarse, porque el cambio viene ahí, cuando te tomas un tinto con el dueño del cliente y hablan sobre qué está pasando en realidad el núcleo familiar y por qué hay ciertas circunstancias que generan conflicto y se ven reflejadas en el perro.
Esa, es la parte que hay que entender, y por eso la evolución del adiestrador va mucho más allá del condicionamiento clásico y operante, la evolución le exige ser un psicólogo, porque muchas veces con sólo hablar con la persona una hora sin tocar el perro ya cambiaste la forma de ser del perro. Porque sencillamente si a la persona le cambia la percepción de qué es su perro, lo ve diferente y si lo ve diferente su perro se porta diferente y por lo tanto se siente diferente por que ya no tiene ese humano que lo reprime; es cómo tener un niño de 6 años queriendo montar en bicicleta y subirse a los árboles y la mamá detrás exigiéndole que no lo haga.
Lo que hay que entender es que el adiestrador debe evolucionar a hablar con el dueño del perro y entender su parte emocional. Dependiendo de tu estado emocional se va a crear el comportamiento del perro, si yo cojo dos perros iguales y se los entrego a dos personas diferentes, uno de ellas está en pánico en este momento de su vida, y la otra está en ansiedad; en tres días los perros son completamente diferentes.
¿Entonces nuestro perro es el reflejo de lo que somos?
A veces solo con oír a la persona ya te imaginas el perro. Con el tiempo te das cuenta que el pelado bonito solo, el perro es de una forma; la señora recién casada que no quiere tener hijos, el perro es de otra forma, y así sucesivamente. Empiezas a ver cuadros de comportamiento que encajan con las emociones de las personas, y esas emociones afectan el comportamiento de un animal, y la explicación es esta:
Tu te vas a una vereda y mira un beagle de 6 meses, ¿qué está haciendo? Acostado, fresco, ya corrió lo que debía correr, pero con una tranquilidad la berraca. En cambio, ¿qué pasa con un beagle de 6 meses en la ciudad? Está enloquecido. Entonces, hay dos factores: el entorno y la impregnación con el humano, porque si soy una persona que poco socializo, no saco a mi perro, si soy una persona que necesito hablar con los vecinos todos los días 2 horas antes de irme a dormir, mi perro seguramente no me va a hacer caso, ese es el perro típico que lo llamas en los parques y no viene. Si la persona es una persona que todas las noches sale a hacer deporte, tiene un perro más juicioso, porque su comportamiento es más lobo, que sigue a su guía. Entonces, cada comportamiento humano va creando la forma de ser del perro.
Ahora, hay que tener en cuenta que el perro ve al ser humano como un ser aburridísimo, el más lento de todos. Ellos nos ven caminando como jirafas, y ellos van a mil por hora y lo miran a uno como “apúrate abuelito, es que la vida se pasa, mira los pájaros, y tu caminando a dos”. Pero el dueño se preocupa porque no le hace caso cuando lo saca al parque, que no lo mira, pero eso es como pedirle a un niño que mire a su abuela en el parque, el niño lo que quiere es subirse en el árbol, jugar, revolcarse en la tierra, porque el niño está en el momento de exploración. Eso no lo entendemos en los perros, y todo eso es lo que necesita vivir el perro y eso se lo da un humano equilibrado, que está en la capacidad de entender que su perro es un cachorro y necesita hacer ejercicio y salir al parque. Pero si yo estoy en un momento de crisis, en quiebra, y me siento solo, no voy a pensar en lo anterior, y por supuesto no se lo puedo dar. Entonces es ahí donde vienen los problemas, el perro no tiene la culpa de nada, el perro es un ángel.
Hablando entonces de problemas comunes en los clientes, si llego a mi casa y el perro se hizo pipí, ¿qué debo hacer?
Lo primero es: respira, cuenta hasta diez y no le pegues. Hay algo importante en los problemas de esfínteres en los perros: El perro que saco a la calle una hora no orina y a penas llega a la casa orina; ese perro tiene miedo. Porque no ha socializado y no está seguro de su entorno. Si yo soy un niño inseguro y me sacan a un centro comercial, yo no orino; orino cuando llegue a mi casa, hasta el día que salga al centro comercial y me relaje y entienda mi entorno.
Es lo mismo que le pasa a un perro, es miedo. ¿Qué debe hacer ese perro? Salir al parque, hacerse dos amigos y jugar, corretiar, que lo revuelquen e irse soltando. Este es el perro que cuando llega otro perro mete la cola y se tensiona, este problema de hacerse pipí va ligado a este comportamiento.
Dos, los perros que se comen el popo: Muchas veces puede ser una carencia en algún mineral, en alguna calcaria, pero también puede ser ocasionado por el cliente, por que cada vez que el perro se hace popo le pega, y el perro entiende que no puede haber popo entonces hace popo, se lo come y se ahorra los golpes. Este es un problema a veces desarrollado por el humano.
Por lo tanto, la solución para un perro que no orina en la calle sino que orina en la casa o el apartamento, es más calle, es tener paciencia, salir a buscarle un amigo. Es el niño inseguro que en la familia no tuvieron el tiempo de sacarlo al parque, que jugara, correteara e hiciera amigos, ese niño es el que más adelante no va a poder crear una empresa solo por que es inseguro. Entonces, es miedo, no entiendo el entorno y no puedo orinar afuera.
Hay otra parte importante y muy común, cuando el cachorro está entre los 2 meses a los 5 meses que está aprendiendo a controlar sus esfínteres, cuando el humano llega de la calle el perro se emociona, y cuando el humano se sobre exita y sobreexcita el perro, el perro libera chorritos de pipi. Y muchas veces el humano celebra porque inconscientemente da goce: “hice orinar al perro de la felicidad, wow!” y queda el problema en el perro, porque cada vez que el perro saluda lo sobreexcita. ¿Entonces que se hace ahí? No consiento el perro cuando él llegue y le corrijo esa acción al dueño del perro.
Otro tema muy común, es: llora mucho cuando está solo en la casa. ¿Qué podríamos decir sobre estos casos?
Concientizar, es decir no puedo comprar un Beagle, un Jack Russell Terrier o un Weimaraner y dejarlo solo en un apartamento mientras voy a trabajar todo el día. Por otra parte, puede ser un cachorro, esto puedes ser habitual mientras se acostumbra a estar solo y hay que recordar que el cachorro viene de abandono, entonces viene un poco triste.
Otra cosa es ansiedad por apego. Esta clase de perros son los que llamo que están en energía Ying. Yang es todo lo que se puede expresar, que fluye, para que me entiendas, Yang es la autopista después del peaje, Ying es trancón y se calienta. Estos perros son perros que no se han podido expresar, que estan atorados. Cuando un perro está en Ying entra en pánico muy fácil, es inseguro, dependiente, apegado. Entonces necesitamos energía Yang ¿Qué hay que hacer? Salir a hacer a hacer ejercicio, trotar con el perro, llevármelo a una montaña a medio día para poderlo ayudar. No me serviría un Shhh o un collar electrónico, sino es buscar la forma de ayudar al perro a desanudarse.
Hay tres aspectos que uno siempre debe tener en cuenta al hablar de comportamiento canino:
La genética: qué genética trae el perro siendo un pastor o terrier
La percepción: qué percepción tiene del entorno
La Adaptación: y cómo se adaptó a ese entorno.
En el caso anterior, el tema está en la percepción. Es como si yo te llevo al paraíso y te encierro. Puedes tener una muy mala percepción y vas a aruñar la puerta y ladrar desesperadamente.
Otra problemática muy común, el perro jala la correa:
Para que el perro no jale la correa hay que enseñarle al dueño del perro técnicas para que el perro no jale, mientras se crea un vínculo con el paso del tiempo. No lo veo como un problema de comportamiento, o un tema de adiestramiento, es de enseñarle al dueño. Para el perro es muy aburrido caminar al paso del humano, después de cierta edad es más fácil, pero mientras el perro es jóven es como ir al parque de diversiones con la abuelita. Ya cuando es un perro adulto y jala por irrespeto ya lo puedo corregir con un collar de ahogo, pero mientras es cachorro tengo que ser muy laxo, no puedo ser tan cuadriculado, además hay que proteger la tráquea del perro que se desarrolla hasta los 8 meses. Acá hay muchas variables, hay que asesorarse y ver cuál es la mejor opción para mi y para mi perro.
Hablando entonces de asesoría ¿qué tal está la medicina veterinaria con respecto a entender el comportamiento canino?
Si, hacia allá va la medicina veterinaria. Se han dado cuenta que los mismos órganos están en perros y humanos; y funcionan en el mismo sentido, por eso tenemos las mismas emociones. Todas las enfermedades en los perros se están desarrollando igual que en los humanos, por que nos estamos intoxicando de nuestro estilo de vida, y nuestro estilo de vida está intoxicando a los perros.
Por otra parte, viene una fusión entre la alopatía y la holística. Los médicos están estudiando homeopatía, medicina biológica y ahi si se habla de comportamiento, y las carreras se están dando cuenta que deben incluir como materia el comportamiento. Un perro que se está enfermando de artritis tiene un comportamiento diferente a un perro que se está enfermando de la parte hepática o del pulmón. Esto es muy importante porque se ha descubierto que la ansiedad enferma el estómago, la nostalgia te enferma del colon y de los pulmones, los nervios la parte renal y la histeria la parte hepática.
Por eso un perro ansioso tiende a enfermarse del estómago y lo manifiesta mordiendo. Un perro nostálgico es un perro que tiende a enfermarse del colon y de los pulmones, y generalmente es un perro que olfatea mucho y es más tranquilo. Entendiendo eso, se crean los cuadros de comportamiento, y hacia allá es que se deben enfocar los estudios de los profesionales, de forma que entendamos más el perro no solo desde la alopatía, sino también desde su comportamiento y su contexto. Recuerda que los perros y los gatos absorben nuestra energía y muchas enfermedades vienen desde la parte emocional. Yo tengo un consultorio, y allí me llegan problemas de comportamiento, pero un problema de comportamiento que me parece lindísimo son los problemas de piel y resulta que el gato o el perro son muy sensibles al cambio de entorno, y cuando una pareja pelea y el esposo se va, y ahí el perro se inmunodeprime, cuando esto ocurre el órgano expuesto es el pulmón, esto va ligado al corazón y se refleja en la piel. Entonces el 90% de los problemas de piel son problemas emocionales, esto no lo ve un alópata, y te enviará cremas medicamentos, pero a los 4 meses el problema vuelve a aparecer. Siempre que pregunto me encuentro con cosas como estas: mi perro se pela hace 4 meses, ¿y cuánto tienes de embarazo? 4 meses. entonces hacia allá va la medicina, entender un poco qué es lo que le pasa al paciente.
18 Marzo, 2015 at 17:40
Que buena iniciativa, se aprende muchísimo.
Cuándo hacéis la próxima?
Saludos.
22 Abril, 2015 at 7:56
Que bien organizado lo tenéis. Se aprende y evoluciona mucho con nuestras mascotas.
Gracias a todo el equipo por su trabajo!
29 Junio, 2015 at 15:45
Estamos en búsqueda de otros conferencistas.